domingo, 25 de octubre de 2020

1.- Fortalecer el APEGO (del bebé al adolescente)

 

FRÍO EMOCIONAL 

“…- ¿Frío emocional? ¿Frío a pesar de estar abrigados?- SÍ, es un frío distinto, es un frío que puedes sentir aunque lleves ropa de abrigo. Es un frio que nace del alma, que se extiende por el cuerpo y que no hay tejido que lo haga desaparecer. Sólo se quita si sientes que otro está para ti, que eres para alguien lo más importante del mundo y que los brazos, alas o patas de ese individuo son un lugar que siempre te espera. - Ya pero nosotros estamos ahí- Ya pero, ¿se lo hacéis sentir?, ¿se lo demostráis?,  ¿ellos pueden saberlo?...”  (Extracto del cuento -frío del alma-“Cuentos para el desarrollo emocional desde la teoría del apego. R. Guerrero y O. Barroso)

El Apego- podemos definirlo como un vínculo afectivo de fuerte intensidad, bidireccional (padre/madre e hijo/a) aunque asimétrico pues es el bebé el que depende y necesita a la figura adulta para sobrevivir, crecer y desarrollarse.  El apego es un vínculo que hemos de cuidar con mucho mimo pues de que sea “seguro” dependerá en gran medida que nuestros pequeños crezcan sanos, física y emocionalmente.

¿Y qué es el APEGO SEGURO? Podríamos resumirlo en aquel que encuentra el equilibrio entre la PROTECCIÓN  y la AUTONOMÍA. Los padres y madres que desarrollan un vínculo seguro hacia sus hij@s son sensibles a sus necesidades, empatizan y les aportan aquello que necesitan.  Pero además buscan aportarles la reflexión de la experiencia para aportarles al mismo tiempo seguridad y futura autonomía.

¿Qué hacer para buscar este equilibrio?

1.- Diles “te quiero” cada día. Porque está claro que les queremos pero dar por hecho que ellos lo saben no alimenta el apego, la seguridad… porque hay situaciones que les pueden llevar a la duda y, la duda a la inseguridad. Yo, desde pequeños, cada vez que les riño o me enfado por algo que hicieran mal, tomé el hábito de decirles “Estoy muy enfadada por… aunque te sigo queriendo hasta el infinito, eso nunca cambiará”.

2.- Pregúntales ¿cómo te sientes?. Y ante un triste, contenta, cansado, frustrada…. Pregunta ¿por qué? ¿Qué te hace sentir así? ¿Puedo ayudarte?... pero nunca digas “pero si eso es una tontería... O le hagas cosquillas para que se le pase a la tristeza”. Para practicar la empatía con ell@s, y ayudarles a gestionar lo que les pasa, hemos de escucharles y entenderles. Así les ayudaremos mucho mejor.

3.- Busca el equilibrio entre –Darle lo que necesita en cada momento (seguridad)  y-Que aprenda a hacer cosas por sí mism@ (autonomía). Los primeros pasos estarán cargados de Seguridad y, poco a poco, les iremos dando esa autonomía que necesitarán para crear su gran fuente de autoestima.


Ojo!!... Fortalecer el apego es fundamental en los primeros años de edad, cuando son más dependientes pero... no olvidemos que si el mensaje que queremos lanzarles es "estoy aquí para lo que me necesites", tenemos que seguir alimentándolo más allá de la infancia.

 

¿Alimentar el apego en la adolescencia?.. También, claro. Y, si nos dimos cuenta de no lo alimentamos suficiente de aquí para atrás, aún podemos hacer algo. ¿Cómo?

1.- Escúchale para intentar entenderle, no convencerle.

2.- Legitima sus sentimientos, porque vienen de lo que el pasa, cómo lo interpreta y cómo le lleva a hacer sentir. Intenta comprender ese viaje, su viaje, y no intentes aconsejar desde lo que tú harías (a día de hoy con tu edad, experiencia, forma de ser..) sino que invierte tus esfuerzos en entender cómo le afecta y que reflexione sobre las opciones que tiene y cómo le harían sentir cada una de ellas.

3.- No le juzgues, porque inmediatamente se produce un taponamiento de oídos que con el agua salina no sale. Escucha, ponte en su lugar, ayuda a la reflexión y su toma de decisión.

4.- Marca límites y normas. Pese a que nos llevan a discutir, son necesarias no sólo para su seguridad física, sino también para su seguridad emocional. Ahora bien, las normas también pueden ser negociadas, siempre que haya un diálogo sensato…. Promuévelo.

Le estás haciendo sentir importante para ti, escuchad@, entendid@, apoyad@... Fortaleciendo el apego en la adolescencia también es posible.






viernes, 24 de abril de 2020

Práctica N.17: SIENTO MIEDO A SALIR



Ya estamos sintiendo algo más cerca y real que se acerca el momento de salir del confinamiento y, sin embargo, ¿nos aparecen sentimientos encontrados?. Quizás sintamos alegría porque podremos volver a nuestra actividad laboral, a ver a nuestros familiares, a salir y sentir aire y el sol…. Pero al mismo tiempo ¿aparece otra emoción que nos hace mirar a la puerta de salida con cierto recelo, incluso rechazo?.. y es el miedo el que nos puede apartar ahora de eso que tantos días estamos deseando hacer ... salir de este encierro!!

Y es que es posible, que después de tantos días de confinamiento el miedo se haya instaurado en nosotr@s. Y, en cierto modo,  es normal pues a nuestra mente le hemos estado infundiendo el mensaje de que estamos dentro para protegernos del peligro que puede estar fuera, el peligro de contagio. Y, ahora, hemos de asumir que podemos salir pues el peligro ya es menor (pese a que tenemos que seguir guardando medidas protectoras). Hasta ahí bien, saldremos pero manteniendo las medidas de seguridad que se nos propongan o impongan y nos iremos ahora acostumbrando a una “nueva forma de relacionarnos” durante bastante tiempo.

Pero ¿qué ocurre si, en el momento de salir a la calle, nos quedamos paralizad@s y nuestro cuerpo responde con ansiedad? Pues, alerta! Porque podríamos estar sufriendo algo parecido al trastorno de agorafobia mezclado con el miedo a la contaminación. En casos extremos los síntomas podrían ser: taquicardias, temblores, mareos, vértigos, hormigueos, sudoración, dificultades para respirar, desmayos, vómitos, palpitaciones, etc. y en estos casos deberíamos recurrir a un especialista para que nos ayude. Pero lo que pretendo con esta práctica es que no lleguemos a ese extremo y sepamos detectar los primeros síntomas y romper la cadena.

. Sentimos miedo a salir a la calle porque “nos podemos encontrar a gente y no saber cómo actuar, corremos el miedo de contagiarnos, nos asustan las caras de pánico que vemos detrás de las mascarillas….” Este miedo nos genera ansiedad, nerviosismo… que realmente no salta ante la situación de salir sino ante la anticipación de esa situación. Si nuestra respuesta es “No salgo”, lo que conseguimos es evitar la situación que anticipamos desastrosa y, con ello, reforzamos el acto de “quedarnos protegid@s en casa” y correremos el riesgo de que el miedo lo sintamos cada vez más real y nos resulte cada vez más difícil superarlo. 
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    SITUACIÓN: Nos disponemos a salir a la calle a hacer compras o dar un paseo
    PENSAMIENTO: Me voy a empezar a encontrar con gente y no se si voy a ser capaz de guardar la distancia de seguridad, y si se acerca qué le digo, y si me contagio…
    RESPUESTA EMOCIONAL: Ansiedad
    RESPUESTA CONDUCTUAL: Mejor no salgo, ya me dará el aire otro día y encargo la compra. (evito la situación y refuerzo así la conducta de quedarme en casa)


¿Qué hacer entonces? Pues recogemos el miedo, entendemos por qué lo tenemos, lo aceptamos y nos enfrentarnos a él, es decir, a las situaciones que de manera anticipada estamos tachando de posibles elementos ansiógenos ante los que creemos no saber responder.
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    SITUACIÓN: Nos disponemos a salir a la calle a hacer compras o dar un paseo
    PENSAMIENTO: Me voy a empezar a encontrar con gente y no se si voy a ser capaz de guardar la distancia de seguridad, y si se acerca qué le digo, y si me contagio…
    RESPUESTA EMOCIONAL: Ansiedad
  RESPUESTA COGNITIVO-CONDUCTUAL: Tengo miedo, es normal, no pasa nada pues voy a buscar soluciones por si esas situaciones que me asustan se dieran. Busco soluciones a los posibles problemas que me pueda encontrar, me enfrento a ellos si suceden. Salgo de casa y evalúo, de manera real, los riesgos que me imaginaba.  Me demuestro que si alguien se acerca me echaré hacia atrás para cumplir con las medidas de seguridad, que puedo dar un paseo sin correr riesgos. Y si hay situaciones que no he sabido afrontar de manera positiva, buscaré otras alternativa…. Al salir, me enfrento al miedo que me había creado sobre hipótesis que no sé si sucederán o no y que si no las enfrento corro el riesgo de que se acrecienten y me incapaciten cada vez más.

"No hace falta conocer el peligro para tener miedo; de hecho, los peligros desconocidos son los que inspiran más temor" Alejandro Dumas 


sábado, 18 de abril de 2020

Práctica N.16: CUIDEMOS AL ADOLESCENTE DE LA CASA


Se habla mucho de las necesidades de actividad, de atención, de entretenimiento de los niños y niñas durante estos días. Y nos llegan millones de manualidades, juegos y tareas lúdico/didácticas para hacer con ell@s. Y, con todo lo que hay, para los peques tan sólo me gustaría recomendar que, "las tareas/juegos/actividades ludico-festivas... No nos estresen!!" parece una tontería, pero es que si hacemos lo que hagamos con ellos, nos agobia "porque no llegamos, porque no sale como queremos, porque no soy lo suicientemente divertid@ o habilidos@..." va a resultar más perjudicial que beneficiosa la actividad. Es mejor hacer menos pero con calidad que mucho pero con estreses añadidos (porque se los transmitimos a ell@s). No nos exijamos más de lo que podamos dar, ell@s nos necesitan felices y tranquil@s.
Bien... Pero yo quería detenerme hoy en otra etapa posterior.. La adolescencia. Y quiero detenerme en ell@s porque también considero que tienen necesidades muy especiales (y porque tengo uno en casa ). 
Os intento transmitir algunas claves para hacer más fructífera nuestra convivencia, para que les podamos entender mejor y para que les podamos tender nuestra ayuda.

1.- Cuidado, no sobre-exigirles. No son niñ@s ya, pero tampoco son personas adultas. A veces les vemos tan creciditos, tan pidiendo que les dejemos de tratar como niñ@s ya, que tendemos a tratarles y exigirles que respondan y piensen como adultos. Y esto nos puede llevar a sobre-exigirles y, si no responden como deseamos, a infra-valorarles: "pues ya tienes edad para... Y lo haces fatal", "ya podías darte cuenta con la edad que tienes...". Cuidado con estas frases, pensamientos y acciones que lejos de ser constructivas, destruyen su autoestima y nuestra relación con ell@s. Son grandes de tamaño, a veces, incluso de edad, pero de corta experiencia y, sobre todo, en una etapa en la que la autoestima la tienen en pleno estado de "recomposición" y, por lo tanto, de peligro.

2.- Alimentemos su autoestima. Y lo anterior nos lleva a lo siguiente y es que aunque nos pongan cara de "pasa de mi con tus tonterías", cuando les decimos lo guap@s que son o lo bien que hacen las cosas... Eso no quiere decir que no les guste que se lo digamos. Invirtamos tiempo, en jugar a descubrir las cosas que hacen bien, o que van mejorando y .... Se lo decimos!!

3.- Sigue demostrando tu cariño. Si, parece que no lo quieren, porque ya no se llevan los abrazos, los besos o los "te quiero"... Aunque eso suceda, ell@s necesitan saber que nuestro amor es incondicional así es que no dudes en que le quede claro-cristalino.

4.- Echan muuuucho de menos a sus amig@s. Si, ahora lo más importante, a nivel social, en sus vidas, son sus amistades, por mucho que nos duela (si esto lo unimos a que lo besos ya no lleguen, lo podemos llevar realmente mal), Legitimemos esta realidad, escuchemos qué necesitan y cómo podemos ayudar a que su "soledad" sea más llevadera.

5.- Sus problemas también son reales. Tendemos a minimizar lo que les pasa, lo que les falta, lo que les preocupa... Y eso les transmite que no les entendemos, no nos molestamos en escucharles y, entonces, para qué nos van a contar nada?. Legitimemos la realidad y la magnitud de sus problemas (porque para ell@s son así) y demostrémosles que nuestros oídos están ahí para escuchar, sin juzgarles y sin consejos si no los desean.

6.- Sus emociones no saben gestionarse solas. Claro que a nosotros tampoco nos enseñó nadie a gestionarlas pero como tenemos mogollón de herramientas en línea que nos ayudan y nos enseñan,en muchos casos nos hemos auto-formado, verdad?. Pues intentemos ofrecerles a ell@s estas herramientas también, para que les ayuden a identificar, aceptar y gestionar sus emociones tal y como vienen y no las veamos siempre traducidas en ira, rabia, pasividad, desconianza, tristeza?
A por ellos, que son jóvenes y valios@s!!


jueves, 9 de abril de 2020

Práctica N. 15: -RAIN- Déjate mojar por la lluvia


Hoy, que no para de llover, que está oscuro ahí fuera, que es de esos días que no te apetece salir de casa sino quedarte calentito jugando a un buen juego de mesa, leyendo, haciendo maratón de series... parece que no se disfruta tanto cuando llevas ya X días sin poder salir aún saliendo el sol. 
Hoy, para mi y para much@s es un día en el que los pensamientos "negativos" nos asaltan con mayor facilidad y es por ello y por la lluvia que traje a mi consciente una práctica de mindfulness que ayuda mucho en el día de hoy. 

Cuando nos asaltan los pensamientos "negativos" tendemos a luchar, huir o desconectar. Si luchamos contra ellos para que desaparezcan, pero sin gestionar bien las emociones y conductas que llevan pegados, puede que la respuesta de lucha en sí misma se convierta en un problema (Ej: si para luchar contra el pensamiento de "no se hacer nada bien" que me genera inseguridad respondo siendo agresiv@ con los demás) . Si huimos de ellos podemos conseguir aliviarnos un rato pero volverán (una copita de vino y se ve la vida de otro color) 

Una estrategia para responder, más adaptativa pasa por reconocer y aceptar, y para ello, te invito a practicar RAIN, para que te dejes mojar por la lluvia: 

1.- Reconocer que mi pensamiento es "X", la emoción que me provoca es "Y", la conducta que me desata es "Z" (recordad que lo que no vemos y reconocemos no podremos trabajarlo, así es que haz que salga a la luz)
2.- Acepta que piensas, sienes, haces "X-Y-Z". Sí, porque sentirte triste, insegur@, asustad@ (X) porque piensas que no sabes si habrá una salida, cuándo podrás volver a abrazar a tus padres, si estarán todos bien (Y) y perder el control y dar voces y enfadarte (Z) puede ser normal en esta situación, es lo que te pasa... está ahí. 
3.- Investiga cómo lo vive tu cuerpo, cómo lo que sientes se refleja a nivel físico: me duela la cabeza, tengo contracturado los hombros, fruncido el ceño, tensos los brazos....
4.- No te identifiques con lo que ves, con lo que sientes, con lo que haces. No eres un/a gruñón/a que piensa de manera derrotista y llora. Tú no eres lo que puntualmente haces, sientes, piensas,,, eres mucho más que todo eso, sólo que ahora tocó así. Tu todo es mucho más que la suma de tus días, momentos, sensaciones.


R.A.I.N es una práctica de autoindagación que puedes aplicar a tu vida cotidiana para tomar consciencia de los desencadenantes de aquellas reacciones emocionales intensas


¡¡RAIN!!! Déjate mojar!!


Reconoce la presencia de los pensamientos, emociones, sensaciones, recuerdos, deseos… 



Acepta que eso es lo que piensas o sientes. No pelees contra ello. 



Investiga cómo esto se refleja en tu cuerpo, ve a él. 



No te identifiques con lo que aparece. Recuerda que “tú” no eres tus pensamientos, tus emociones, tus recuerdos o tus deseos…

Práctica N. 14: EL VACÍO

Vacío, la sensación de vacío es muy común en los estados de ansiedad. Esa sensación de que algo nos falta y, a veces, no sabemos ni si quiera definir qué es.
Esta sensación de vacío emocional se acrecienta en esta etapa de confinamiento porque es mucho más evidente y palpable que nos faltan "cosas" que llenaban nuestro día a dia. Nos falta el abrazo de nuestros familiares, el café con l@s amig@s, el deporte al aire libre, el contacto con la gente, el sol!!. Tenemos vacíos que nos resultan evidentes y también otros que no sabríamos definir del todo pero... Que están ahí...
Entonces... Estamos llenos de agujeritos? Pues si, agujeritos o agujerazos que, de una manera u otra, vamos a intentar tapar. Y cómo los tapamos? A veces de manera constructiva (no puedo abrazar a mi amilia, pero hablamos 2/3 veces al día para sentirnos más cerca)... Pero, otras veces lo hacemos de manera más "destructiva" (No puedo salir a tomar el sol, me aburro...asalto la nevera de forma descontrolada).
Cómo lo trabajamos para que llenemos estos vacíos de la manera más positiva posible?
1.- Descubramos nuestros vacíos porque solamente aceptando que están ahí, podremos abrir las puertas al cambio: y para ello, os vuelvo a recomendar ejercicios de autoconocimiento que nos ayudan a detectar cómo nos sentimos, qué pensamos, cómo lo resolvemos. Registrar nuestros pensamientos cuando nos sentimos "nervios@s", hacer ejercicios de atención plena, nos puede ayudar.
2.- Una vez detectamos nuestros vacíos... Con qué los estamos intentando llenar? Es productivo o destructivo?. Si tetectamos que los llenamos de cosas que nos harán más perjuicio que beneficio, ha llegado el momento de cambiar la manera de llenar nuestro huequito.
Mucho ánimo y trabajemos para que nuestros vacíos se llenen de otras cosas alternativas que nos hagan felices también.
Los siguientes enlaces nos pueden servir para entenderlo mejor y para trabajarlo con nuestros pequeñ@s y no tan pequeños que también tendrán sus vacíos y necesitarán nuestra ayuda para detectarlos, aceptarlos y llenarlos mejor.
Vídeo “el vacío” Ana hienas. https://youtu.be/bBVF3iZsyL4


Práctica N. 13: PATEANDO PENSAMIENTOS NEGATIVOS


La vida nos está presentando desafíos. Estamos en una situación que no hemos elegido y que no podemos controlar. Nuestra tarea se centra en cumplir las normas que se nos transmiten desde arriba, para tratar de contener esta epidemia y que podamos, cuanto antes, volver a la "normalidad".Tener pensamientos negativos o derrotistas ante este panorama es lo normal. Sin embargo, alimentarlos, retenerlos, mantenerlos durante largo tiempo va a hacernos daño y va a disminuir la calidad de nuestros días, incluso va a hacer disminuir nuestra autoestima. Vamos a trabajar entonces para patear a nuestros pensamientos negativos, improductimos, rumiativos (de todas estas formas les podemos llamar, pero les vamos a patear igual 
Antes de nada es importante que entendamos la siguiente imagen PENSAMIENTO/EMOCIÓN/CONDUCTA. Y es que nuestro comportamiento está guiado, por nuestras emociones y sentimientos y estos manejados por nuestros pensamientos, Pero además son tres partes de nuestro ser que se retroalimentan mutuamente. Un ejemplo: Si pienso que la presentación del trabajo no me va a salir bien-me voy a poner nerviosa-eso hará que mi cuerpo tiemble, se me seque la boca y hable torpemente-esto ocasiona que piense que mi presentación está claro que será un desastre-comenzaré a sentirme humillada-me pongo roja y me tropiezo. Vemos el desastre que hemos ocasionado? Y todo comienza por "pensar que no me va a salir bien" y es aquí donde os propongo trabajar... Con nuestros pensamientos.
Ojo, soy consciente de que detectar los pensamientos no es tarea fácil pero, si pensáis que no pensáis nada... Error... Haced un mayor esfuerzo y dará sus frutos. Es mucho más sencillo saber cómo nos sentimos y cómo nos comportamos, así es que este será nuestro punto de partida.
1.- DETECTARLO: y para ello nos vamos a arrimar a nuestra emoción/sentimiento pues pegada a ella estará el pensamiento que la ocasiona. Ej: Nos comenzamos a sentir nervios@s, con ansiedad, triste... En es momento de parar y detectar... Qué estoy pensando?. Que probablemente se parezca a "necesito salir a ver a la gente que quiero, no se si estarán bien como me dicen, qué pasará cuando salgamos e aquí...". Practicas técnicas para el autoconocimiento como algunas de minfulness nos ayudan a detectar nuestros pensamientos de manera más rápida.
2.- PONLO EN DUDA: Los pensamientos negativos se denominan rumiativos porque son excesivos y no pofemos pararlos y es por ello que nos generan tanta ansiedad, y además son improductivos porque no nos llevan a solucionar nada. Por lo tanto, hazte estas dos preguntas -me estoy excediendo con este pensamiento? -me lleva a alguna parte? Pues pongamos al pensamiento en duda: Ejem: -Por qué no van a estar bien, si me dicen que lo están?, puedo hacer algo para cambiar la situación? Puedo controlar lo que pase cuando salga? Me sirve de algo preocuparme por cosas que no se si sucederán?
3.- NO PUEDES CAMBIAR LA REALIDAD, PERO SÍ CÓMO TE AFECTA.: Una vez pongamos en duda nuestros pensamientos negativos, los tenemos ya más debilitados (aunque si llevan ahí tiempo con nosotros seguramente no se hayan ido aún). Pues con ellos debilitados nos vamos a trabajar la conducta porque, recuerda el dibujo que se retroalimenta, si nos levantamos y hacemos cosas que nos animen, que nos diviertan, entretengan, .... Estaremos contribuyendo a debilitar aún más el pensamiento negativo y además a levantar nuestro estado de ánimo. Dedica unos momentos todos los días a descubrir lo que piensas/sientes/haces y no sólo en los momentos plof, también en los buenos momentos que te harán descubrir qué es lo que te hace feliz.
A por un día más, un día que servirá para algo, un día que formará parte de nuestras vida, un día que podemos utilizar para crecer!!!


martes, 31 de marzo de 2020

Práctica N.12: Ojo! que nuestros rituales de limpieza no se conviertan en TOC


Llevamos un par de semanas ya, y las que nos quedan, estableciendo e intentando inculcar a nuestros hij@s, ciertos rituales de limpieza para poder prevenir la infección por coronavirus. Comenzamos con una limpieza concienzuda de manos, uso continuado de geles higienizantes, guantes, mascarillas, desinfección con disolución a base de lejía de la compra, los pomos de las puertas, lavado de ropa según llegas del supermercado... etc. 

Hasta aquí todo bien, pues son las prácticas que se nos recomienda realizar para poder parar esta pandemia, pero, traslado una pregunta ¿Cuánta carga de ansiedad, angustia, estrés, llevan pegadas estas tareas? Que es normal que nos pase, pues tenemos una falta de control sobre lo que no vemos y un miedo que, a veces, tenemos que pararnos a canalizar, aceptar y que no nos afecte de manera negativa. Para mi, el primer día de compra en el super, con los guantes puestos, los de repuesto, el gel higienizante y la tarjeta en el bolsillo, el móvil en una bolsa, las mascarilla que me empañaba las gafas cada dos por tres...uff!! fue agotadora, de hecho, y no se bien por qué, me recordó a las clases prácticas del carné de conducir en las que sufría del tal tensión que perdí dos kilos en una semana de clases. En las siguientes compras ya conseguí aligerar la tensión y el empañamiento de gafas ;), así es que no tengo la esperanza de perder kilos con esta tarea (y mejor que así sea... le tendré que dar más al Yoga)

Bueno, lo que quiero transmitir es que estemos atent@s y nos trabajemos para que mantengamos a raya la ansiedad y nuestros rituales de limpieza para que no se conviertan en la antesala para desarrollar un TOC. Y, con esto no pretento, por favor, añadir una tensión más, sino tan sólo que nos mantengamos en alerta y prevenir antes de curar.

Muchos especialistas afirman que no se puede prevenir un TOC pero, si estamos atentos por el hecho de estar viviendo una situación que podría ser desencadenante, mi consejo es que "Para prevenir y actuar en el TOC es esencial la comprensión e identificación de síntomas"

Y un TOC ¿qué es?. En algunas ocasiones, la ansiedad y el estrés llegan a un nivel tan elevado que pueden comenzar a surgir pensamientos negativos, miedos irracionales que pueden derivar en comportamientos repetitivos que lo que buscan es que estos pensamientos o miedos desaparezcan. El problema surge cuando llega a afectar el ritmo de nuestro día a día causando mucha angustia y cambios emocionales drásticos. El Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC) es la respuesta a todos esos síntomas y es algo que comúnmente podemos hacer caso omiso, pero que puede ser importante que conozcamos sus síntomas con el objetivo de prevenir porque 

En líneas generales se manifiesta cuando en nuestro pensamiento, experimentamos la presencia de ideas, imágenes o impulsos, de un modo repetitivo e insistente, que generan malestar y ansiedad.

También a nivel de conducta, pueden aparecer compulsiones, que son acciones o rituales reiterativos, que van a tratar de disminuir la angustia producida por las ideas obsesivas, aunque pueden no tener una relación directa con ellas.

El mecanismo es un bucle que genera una gran ansiedad.. lo vemos fácil y claro en el dibujo de más abajo:




Recuerda: "Para prevenir y actuar en el TOC es esencial la comprensión e identificación de síntomas". Si lo detectas que tus pensamientos van camino de ser obsesiones pues te generan ansiedad, y te llevan a realizar los rituales de limpieza más de lo necesario.. será el momento de parar y romper el circulo, dejar de realizar el ritual cuando no sea necesario y trabajar con nuestros pensamientos 
(en la siguiente práctica) 






Y, para reírnos un rato, os recomiendo la peli: Toc toc 

lunes, 30 de marzo de 2020

Práctica N. 11: NECESITAMOS REPROGRAMARNOS?


Hoy, con el cambio de hora que nos regala más luz y que a mi tanto me gusta, observé artículos, comentarios… sobre el efecto negativo que nos puede producir este cambio en esta particular sentadilla casera que estamos viviendo. Y me planteo, ¿nos sentará mal porque los días se nos hacen largos y, con más horas de luz, más largos parecerán?. Si tu motivo es ese, te invito a que hagas la siguiente reflexión y provoques los siguientes cambios.
Reflexión/pregunta: Para ti, estos días de confinamiento son días que ¿“Tan sólo esperas a que pasen cuanto antes, que tachas en el calendario como “un día menos”, de los que no esperas nada más que desaparezcan cuanto antes”?. Si tu respuesta es SI o parecida, te propongo que cambiemos esa actitud. Porque, la crisis, la cura del coronavirus, las medidas que se instan desde el gobierno…. Esas cosas no están en nuestro poder cambiarlas, pero tú ACTITUD, sí que la puedes cambiar. Veamos qué podemos hacer, que nos sirva:
1.- Si tienes un calendario marcado con el día en el que está programado que salgamos y vas tachando cada día que pasa como “un día menos”… te propongo que abandones esta práctica, por varias razones. Miras ese día de salida con ansiedad y esperanza pero, ¿qué pasará si el fin de semana que viene esa fecha cambia y tienes que volver a mover la fecha marcada? Será un día nefasto y frustrante pues el objetivo donde tenías puestas tus esperanzas… se aleja. Además… no tachemos días que pasan, vamos a sumar días que vivimos!! Pues si no, la sensación será de días que pasan y se pierden porque no sirvieron para nada.
2.- Demos utilidad, servicio, sentido a nuestros días de “escondidilla”. Y para ello os propongo dos preguntas que haremos al empezar y al terminar el día. Se enciende el día y me pregunto ¿Qué voy a hacer hoy de especial? Y segura estoy de que hay cosas que quieres aprender, libros que quieres leer, alguna persona con la que quieres hablar, un armario por ordenar, un juego por jugar, una manualidad por hacer….UN OBJETIVO PARA CADA DÍA. Y cuando acabe el día nos preguntaremos ¿Qué aprendí hoy? De algo que leí, que me dijo alguien, de experiencia vivida…. Y si estas preguntas las dejamos por escrito, nos hará que nos esforcemos más en hacer esa mirada hacia dentro y quizás que nos emocionemos por la utilidad de nuestros días cuando podamos salir.
Ah!!! Y sigo insistiendo en la GRATITUD: dar las gracias por algo que tenemos, que vivimos, que sentimos… al empezar o terminar el día, no sólo nos hace disfrutar más de ese día, ese momento, también estamos entrenando a nuestro cerebro para que preste atención de manera natural a las cosas buenas que tenemos a nuestro alrededor.
Feliz cambio de hora!!

jueves, 26 de marzo de 2020

Práctica 10: CONTROL DE LA IRA O ESTRÉS- RELAJACIÓN


Como decía en la práctica anterior, o en todas las anteriores, para escuchar bien, para ponernos en el lugar del otro, para legitimarle y para hablarle  con asertividad, a veces necesitamos, en primer lugar…. CALMARNOS- GESTIONAR NUESTRA IRA O ESTRÉS.

Para relajarnos tenemos montones de prácticas, la mayor parte de ellas, con grandes efectos no tanto inmediatos como a medio plazo pues nos entrenan para el control de la ansiedad más adecuado y rápido. En la práctica 2: “Pongamos a raya la ansiedad”, os ponía algunos ejemplos con enlaces.

Pero hoy me gustaría trasladaros una práctica que aprendí hace poco en la formación en Mindfulness con Manuel Hierro en Bijapi Mérida (formación que ya he recomendado en varias ocasiones y que sigo recomendando, por ser muy práctica y de calidad) y que me enamoró desde el primer día pues me resultó una práctica de una efectividad inmediata, para mi asombrosa. Además me resultó muy sencilla y útil para explicar a los niños (para el control de la ira) y para terapia (para gestión de la ansiedad)

Bien, pues con permiso de Manuel, intento trasladaros lo mejor posible la PRÁCTICA DE LAS 3 "S": Suelta, Sonríe y Siente.

1.- SIENTE y RESPIRA DE FORMA CONSCIENTE: centra todos tus sentidos en la respiración, en sentir, escuchar…cómo respiras, cómo entra el aire por tu nariz y vuelve a salir. Normalmente respiramos de manera automática e inconscientes y centrarnos en la respiración, nos conecta con el aquí y ahora.

2.- SONRÍE: Sin dejar de centrar tus sentidos en la respiración…sonríe, con una sonrisa suave, cómoda, amable, pero sonríe y siente la sonrisa, siente cómo afecta a tu interior, a tu emoción (inicialmente de enfado, ira, frustración….)

3.-SUELTA: y finalmente suelta esa ira, enfado, frustración…. Y para soltarla puedes expulsar el aire con mayor fuerza, si eso te ayuda.

Y ahora ¿cómo te sientes?... Os invito a practicar esta técnica tan simple como poderosa. Y es que creo que el paso 2 de la sonrisa tiene un poder que pasa de nuestro exterior al interior casi sin filtro.

Practica al principio, en plan cómodo, en silencio…. Y cuando le tengas cogido el truco, lo podrás hacer en cualquier situación en la que te pueda venir bien porque “los nervios” se apoderan de tu ser…

Practicar, si os apetece, y me contáis!!




Práctica N 9: COMUNICACIÓN (3)- ASERTIVIDAD


El noble arte de decir las cosas, defendiendo nuestros derechos, pero sin hacer daño a los demás. Tarea nada fácil cuando ciertas emociones, como la ira, el miedo, la frustración…. Se apoderan de nosotros.
Podemos comenzar una discusión esta misma mañana tal que así “Siempre me ocupo de la comida yo y estamos los dos en casa y ni te paras a pensar ni si quiera qué vamos a comer ni quién lo va a hacer porque siempre me encargo yo y no ayudas nada”… ¿Dónde puede derivar esta conversación que comienza con una “queja” y un “ataque”… en lucha de titanes!! Pero no, esto no nos conviene que estamos encerraditos en casa y, ahora más que nunca, nos urge gestionar nuestros conflictos de una forma más positiva. Así es que vamos a transformar esa queja de manera que construyamos frases constructivas, en lugar de destructivas.
En Mediación, utilizamos una herramienta que es la REFORMULACIÓN, que tiene el poder de convertir las quejas y ataques en deseos y sentimientos.
Es de decir, donde dijimos esta mañana “Siempre me ocupo de la comida yo y ni te paras a pensar qué vamos a comer ni quién lo va a hacer porque siempre me encargo yo y no ayudas nada”, diremos “Cariño, me encantaría que de vez en cuando te encargaras tú de hacer la comida y/o la cena, y que pensáramos en el menú los dos juntos pues siento que llevo yo la carta de esta tarea y pensar y hacer la comida todos los días me resulta muy pesado”
¿Qué hemos hecho? Hemos transformado una queja/ataque en un deseo/petición unido a un sentimiento o explicación de cómo nos hace sentir o nos afecta una determinada situación. Y el resultado será cambiar posible discusión por un posible cambio 
Pasos para ser asertivos:
1.- Respiramos y nos calmamos si estamos enfadad@s (en la siguiente una técnica de mindfulness que me encanta)
2.- ¿Qué es lo que me gustaría?
3.-Porque me hace sentir (y/o las consecuencias que produce en mi) …
*.- Lógicamente el tono (la comunicación no verbal en general) ha de acompañar a la frase (no valen tonos irónicos pues nos cargamos todo el trabajo 
Sé que no es nada fácil pero...Venga, vamos a entrenar que estas situaciones las tenemos a diario… Si tenéis dudas, compartimos y preguntamos.


Práctica n. 8: LEGITIMACIÓN


Y esto ¿qué es y para qué?. En Mediación (gestión pacífica de conflictos), se trabaja la legitimación (que tiene todo que ver con la empatía) para entender a la persona con la que se está en discordia para poder negociar después desde una posición mucho más eficiente que la inicial. Y legitimar, es ENTENDER al otro y para entender es imprescindible escuchar, pero escuchar bien, con las orejas dispuestas a recibir toda la información y la cabeza dispuesta a entenderla. Que luego podremos estar de acuerdo o no con: lo que hace, lo que opina, lo que representa… pero escuchamos, entendemos y RESPETAMOS.
Cosa que nos está haciendo falta practicar un poco más últimamente, por lo que observo en las redes. Niños con trastorno de espectro autista con permiso para pasear increpados desde el balcón, amigas farmacéuticas que volviendo de trabajar son insultadas desde las ventanas….
Está claro que a tod@s nos está costando mucho esfuerzo y sacrificio estar en nuestras casas, sin poder salir, abrazar a nuestras familias, trabajar, hacer deporte, tomar café, unas cañitas (paro, paro que me deprimo)… y está claro que nos molesta, incluso nos enoja, ver que hay personas que “parecen” seguir sin respetar las normas.. PERO… antes de juzgar, antes de opinar, antes de… vamos a pararnos a pensar ¿sabemos por qué esa persona está fuera paseando? (Eje. niño con TEA), ¿Sabemos por qué esa chica, sin bolsas de la compra, va por la calle tranquilamente hacia su coche? (ejem: farmacéutica que viene de cubrir su complicada jornada laboral) ¿Tenemos toda la información de esa persona, de lo que pasa para poder criticarla, ponernos en contra, incluso increpar públicamente? (de las formas hablamos en la siguiente práctica: asertividad)
Es normal, estamos cansad@s, tenemos miedos, incertidumbre, ansiedad, rabia (recordamos el iceberg?)…. Toda una serie de emociones que nos vienen, a veces, demasiado juntas para poder gestionarlas de manera positiva y adecuada. Y eso nos lleva a actuar de forma impulsiva, sin toda la información y juzgando y criticando con premura y de manera inadecuada.
Esta mañana estaba yo, agenda y café en mano (intentando crear cierta actividad útil en mi día a día) en mi terraza al aire libre, cuando ha pasado un coche y les he escuchado decir mirando hacia mi “hay que hacer confinamiento” (cosa que estaba haciendo porque estaba en mi casa) y me he sentido juzgada. Me declaro “suertuda” cada mañana que me levanto por tener espacio al aire libre donde respirar en mi confinamiento pero, tener esa suerte no me exime también de sufrir las consecuencias: sociales, psicológicas y económicas (como autónoma obligada a parar en esta crisis)… pero esta información no la tiene quien me juzga y, es por ello, que no me enfado ni se lo tengo en cuenta… por mí, por ellos, por tod@s.
Por ello os pido… intentemos no juzgar porque nunca o casi nunca tendremos toda la información de la persona con la que parecemos no estar de acuerdo. Y, lejos de ayudarnos y acercarnos, que es lo que más necesitamos ahora…. Nos alejamos.


Práctica n. 7: COMUNICACIÓN (2).- Empatía


Y seguimos con la comunicación, porque más importante que nunca, de puertas adentro y de puertas afuera ¡ojo!
Y el siguiente reto, después de escuchar, es “ponernos en el lugar de la otra persona”, es decir, entender qué nos dice, qué siente… porque cada uno de nosotr@s somos diferentes y reaccionamos de manera distinta…. Porque nuestras mochilas son diferentes, cargadas de experiencias, valores, creencias, motivaciones, miedos…. Diferentes y debemos comprender y respetar (insisto….ahora más que nunca!!). Hablemos de empatía, pues…
2.-Practica la EMPATÍA: Cuando tengáis cualquier discusión con alguien recordad la Imagen que adjunto (cilindro), porque os hará recordar que cada uno de vosotros tiene un punto de vista y, no necesariamente uno tiene que tener la razón y el otro no. Invierte tus esfuerzos en tratar de entender por qué el otro ve un círculo, más que en convencerle de que es un cuadrado. Y después le toca a la otra parte escuchar (recuerda utilizar la práctica anterior “si te he entendido bien…” para asegurarte de que os escucháis y os entendéis.
Si no te ha quedado aun claro, ve a la segunda imagen (palitos)… Si te pones a la izquierda, ¿cuántos palitos son? Y, si te pones a la derecha ¿Cuántos palitos son?. ¿De qué depende? De la posición, de la perspectiva, de la percepción de cada uno (que dependerá de su mochila cargada de experiencias, valores, creencias, miedos, deseos…). Hagamos el esfuerzo de intentar ver la realidad que ve el otro… no para que nos convenza, no… para entenderle (y el mismo esfuerzo le pediremos a la otra parte en cuestión)
Venga!! E M P A T I A






Práctica n. 6: COMUNICACIÓN (1).- Escucha activa


Y es que en estos días la forma en la que nos comunicamos es esencial, porque de ella va a depender, en gran medida, el ambiente que generemos en nuestras casas. Bastante nos cuesta no salir de estas 4 paredes para que, encima estemos forjando discusiones, conflictos y mal ambiente. Porque, yo no sé a vosotr@s, pero yo cuando me enfado mucho por algo de casa, mi primer impulso es salir a la calle a “bufar” la rabia y luego volver más calmada…. Pero ahora no podemos así es que…”estrategias pacificadoras sin salir de casa”.
1.- ESCUCHA: Mirad la imagen del iceberg del conflicto pues me gustaría que la tuvierais presente cada vez que tengáis una discusión/problema/conflicto con alguien porque lo que vemos de lo que le pasa a la otra persona es tan solo lo que emerge, pero debajo de lo que muestra su conducta están sus: miedos, deseos, valores… Y sólo si sabemos escuchar y preguntar conseguiremos entendernos.
Podemos comenzar una discusión esta misma mañana porque -“Me aburro mucho” –“Ah si? Te aburres conmigo no?, una semana en casa solos y ya te aburro” –“No, yo no he dicho eso” “Sí, no lo has dicho pero es lo que te pasa, que soy un muermo y lo que quieres es tomar café con tus amigas” – “me estás queriendo decir que solo quiero estar con las amigas?, será que no me gusta hacer cosas contigo, si a ti te apetecieran, claro!!… ¿Dónde puede derivar esta conversación?...en nada productivo, verdad? Y sin embargo, debajo de esas palabras que se cruzan hay miedos, dolor, inseguridad, deseos… que no se expresan pero que vamos a hacer el esfuerzo de sacar a flote
Practica el “SI TE HE ENTENDIDO BIEN … “: escucha + resumen + sentimientos. Escucha bien intentando resumir lo que te dice la otra persona, y además intentando averiguar cómo se siente.
Para el ejemplo anterior: “Si te he entendido bien, te encuentras aburrida y te gustaría que hiciéramos algo diferente, para despejarte, para no pensar….porque imagino que cuando te aburres es cuando más vueltas le das a lo que nos está ocurriendo…Yo también tengo miedo, es normal….¿Qué te apetecería hacer?”


Práctica N.5: GESTIONAR LAS EMOCIONES CON LOS NIÑOS


Y es que parece que en todo mandan las emociones ¿no? Pues sí, las emociones mandan y si ellas están bien bailamos, y si andan regulera, lloramos. Y si a los adultos nos cuesta gestionarlas, a los niñ@s ni os cuento… qué saben ellos de frustración, de rabia, de amor, de felicidad…. Si no hablamos de ello y les ayudamos a IDENTIFICAR-GESTIONAR.
Y para ello, tenemos hoy en día, afortunadamente, montones de libros y material en internet para trabajarlas (en esto no estamos sol@s!!)
Os pongo alguna referencia y os invito a que compartáis las que conozcáis. Lo voy a ir subiendo en imágenes por no poner enlaces a webs pues tod@s sabemos que si compramos, lo haremos en el comercio local 










Práctica N. 4: CON-VIVIR CON LA FRUSTRACIÓN


«La frustración es un estado emocional interesante, porque tiende a sacar lo peor de quien está frustrado.» -Daniel Handler-
Y es que la frustración nos acompaña en estos días, junto al miedo y la incertidumbre. Nos frustramos cuando no podemos satisfacer nuestros deseos, cuando las cosas no salen como planeamos … y, a la frustración reaccionamos expresando impaciencia, impulsividad, depresión, ira, desmotivación…¿Nos suena?. Bueno pues no desesperemos porque la clave está en gestionar bien esta emoción, y para ello:
- La aceptamos: Está ahí con nosotros y hemos de mirar hacia adentro y observar de dónde viene (de no poder salir, que los niños no puedan jugar con sus amigos, no puedo abrazar a mi familia, no puedo controlar las normas que nos vienen dadas….). Cuando detectamos la raíz nos preguntamos ¿Lo puedo cambiar? Y, si la respuesta es “no lo puedo cambiar, la realidad que tengo, yo no la puedo cambiar” Entonces me queda la opción de ACEPTAR y buscar alternativas que puedan cubrir, en parte al menos, mi “necesidad” (videoconferencias, ejercicios en casa, tomar el sol por la ventana…)
- Entendemos: a quien grita, se enfada, discute, se desmotiva….a nuestro lado. Y le ayudamos a gestionar de forma positiva su emoción ¿Qué sientes? ¿Por qué sufres?, ¿Qué necesitas?...¿Lo podemos modificar, conseguir…? No? Pues busquemos juntos la forma de minimizar las consecuencias y estar mejor.
- Ojo a los niños!! Que también se frustran y lo pueden expresar en forma de rabietas, malas contestaciones, tristeza….. Es momento de abrazos y de preguntarles ¿Cómo te sientes? ¿Por qué? ¿Lo podemos cambiar? ¿Podemos hacer otra cosa que te pueda hacer sentir mejor?
Desaparecerá la frustración cuando aceptemos que no todo se puede conseguir, pero que sí puedo buscar y encontrar otras vías para estar bien.
Abrazos miles que, por vencer la frustración, se convierten en virtuales para cubrirte aún más.


Práctica N. 3: ARRIBA AUTOESTIMA….ABAJO PIJAMAS!!!


Y es que voy leyendo y me parece que igual estamos abusando el uso el pijama en momentos en los que igual no nos hace ningún bien. Levantarnos, vestirnos y salir de casa: a trabajar, a comprar, a la calleeee!! Eran nuestras rutinas mañaneras/vespertinas que ahora, se han visto truncadas. Mantener las rutinas, para los niñ@s y personas adultas es esencial para manejar el estrés y mantener nuestro aspecto físico y nuestra actividad es esencial para mantener nuestra autoestima alta. Lamentablemente la actividad habitual no la podremos mantener si somos de los que no salimos de casa ni a trabajar ni a nada de nada, pero nuestro aspecto físico y nuestra actividad mental sí que podemos seguir cuidándola.
¿De qué hablamos cuando hablamos de autoestima? El conjunto de creencias, percepciones, evaluaciones y pensamientos que tenemos acerca de nosotros mismos. Es decir, la evaluación que hacemos de nosotros y nosotras basándonos en nuestro autoconcepto (lo que vemos en nosotros) y lo que nos transmiten los demás.
Entonces, muchos de nosotr@s, que hemos tenido que abandonar una actividad laboral que nos motivaba, que nos hacía disfrutar, entre otras cosas porque sentíamos que otros la valoraban y “nos valoraban”… estamos perdiendo piedritas de nuestro vaso de autoestima. Cuando abandonamos esa actividad deportiva, cultural… que tanto nos gusta y nos hace sentir bien… estamos perdiendo piedritas de nuestro vaso de autoestima. Si todo esto que nos pasa fuese durante un corto espacio de tiempo, las recuperaremos enseguida y, igual ni nos damos cuenta de que no están. Pero si el periodo es prolongado, podemos provocar que nuestra autoestima baje de forma notable… Pero no, porque no lo vamos a permitir, nos vamos a poner a marcar nuevas rutinas y hábitos, permitidos en el espacio de nuestro hogar, que nos hagan estar ON
- Cuidamos nuestro aspecto: y para ello no es necesario que nos encajemos las medias y ese vestido o vaquero que no es nada cómodo, no, pero sí que nos quitemos ese pijama (por bonito que sea) y nos vistamos como si fuéramos a salir a la calle un día de esos que nos ponemos cómod@s. La clave está en marcar rutina y no descuidarse pues esto terminaría afectando a nuestro estado de ánimo.
- Cuidamos nuestra alimentación y ejercicio físico: que influirá en que nos encontremos bien física y psicológicamente. (de este tema, nos podría hablar mejor un profesional de la nutrición)
- Cuidemos nuestra actividad mental y sentido de la utilidad: Alimentemos nuestra mente con conocimientos nuevos que nos motiven y además nos hagan apreciar como productivos nuestros días. Además, si hemos tenido que dejar de hacer una actividad laboral, o parte de ella (por teletrabajo), corremos el riesgo de dejarnos de sentir útiles en esta parcela de nuestra vida y debemos encontrar alguna actividad que pueda suplir a la actividad que ahora no podemos hacer y que nos devuelva ese “sentimiento de utilidad”. Hacer ese curso que no te daba tiempo, esos libros que brillan en la estantería y que estabas deseando leer…. Te puede ayudar
Pregunta de autoconocimiento y reflexión: Cuando termina el día ¿Me siento satisfech@ con lo que hice hoy? ¿Hice cosas que me hacen sentir bien, útil, motivad@?... Si la respuesta es NO, vamos a replantear las rutinas, tareas y actividades del día a día.
Uff!!... Qué largos me quedan los Psicoconsejos y mira que intento hacerlo lo más corto y conciso. Bueno, si te aburren, me lo puedes decir o también me puedo plantear retomar el Blog y allí lo suelto todo y aquí lo resumo?
Si te apetece, puedes compartir lo que haces para cuidar tu autoestima 
Abrazos y besos libres de virus!!


Práctica N.2: PONGAMOS A RAYA LA ANSIEDAD


Ansiedad, paranoia y estrés, pueden ser consecuencias del encierro, así es que os propongo detectarlo y gestionarlos de forma positiva para que no puedan con nosotr@s
Empecemos con la ansiedad. ¡DETECCIÓN Y GESTIÓN!! Y el uno va delante del dos 
¿Cómo detectar rapidoto la ansiedad, antes de que se agrave? Sentir ansiedad en momentos puntuales de nuestra vida es normal y sentirla como consecuencia de esta peculiar sentadilla en casa, es de lo más lógico. Ahora bien, que sea lógico no quiere decir que dejemos que se apodere de nosotr@s, tenemos que mantener el nivel de ansiedad a raya.
Preocupación continua, dificultad para dormir, tensión muscular, presión en el pecho, ganas constantes de llorar, irritabilidad constante y sin motivo aparente…. Son algunos de los síntomas que nos pueden ayudar a saber ¡aquí está la ansiedad conmigo!!...Ahora, qué hago con ella.
1.-Ante la necesidad de llorar….. busca un lugar íntimo, o un hombro cómodo… y lloraaa (¡¡suéltalo!! Como decía Elsa en Frozen https://www.youtube.com/watch?v=9aaOX_SCkLg)
2.- Practica ejercicio físico: Desahoga la tensión muscular y liberas endorfinas (la hormona de la felicidad). Hay estudios que nos dicen que sólo si el ejercicio es intenso, liberamos endorfinas, así es que, cuanto más cachas salgamos de casa, más contentos 
3.- Practica ejercicios de relajación de manera asidua para que los efectos no se queden tan sólo en el momento de la práctica, sino que los convirtamos en rutina. Y, tirando de redes (ejemplos):
- Relajación muscular: https://www.youtube.com/watch?v=STB1hXQL-5A
- Atención plena: https://www.youtube.com/watch?v=qhZlc6THIh4
-Tai Chi: Yo lo descubrí hace poco en la formación mindfulness con Bijapy Mérida y me encantó. https://www.youtube.com/watch?v=4GRGcrH25aY
Puede ser el momento ideal para descubrir el mindfulness online, aunque yo me decanto por terminar por vivirlo de manera presencial (cuando abramos de nuevo las puertas de casa de paren par)
Venga…¿de dónde andamos coj@s y por dónde empezamos que no nos pille la señora ansiedad despeinad@s?


Práctica N.1: AGRADECER.


Y me podréis decir, pararnos a agradecer ahora??? Pues sí, porque cuando pasamos por situaciones difíciles nuestro cerebro es selectivo y, desde un sesgo negativo,tiende a detectar en mayor medida todo lo malo. Entonces tenemos que emplear mayor esfuerzo en entrenar nuestra mirada hacia el otro lado, hacia lo bueno, lo positivo.. ¿Como‽ Pues parándonos y entrenandonos para invertir el sesgo... poniendo nuestro esfuerzo en pensar en lo bueno que me ha pasado hoy (y seguro que salen cosas, siii) Esta práctica ha de ser diaria, al finalizar el día y, si queremos escribirla, aún mejor pues seremos más conscientes de ello!! Y si el agradecimiento es hacia alguien....no nos lo guardemos.. digámoslo!!
Ejemplo: " Hoy, tuve la suerte de no pasar la tarde corriendo y aproveché para, dormir una pequeña siesta, aprender cosas que no sabía y hacer Tai Chí con Marco (que igual lo incorporamos como rutina)"
Si te apetece... Puedes compartir tu "buena cosa del día" tan sólo si te apetece hacerlo porque es una práctica para ti..
Espero que te sirva!!!